Presidentes de diputaciones de toda la Comunidad, con Carrasco en el centro, acompañados por el alcalde de Salamanca.icalNoticias relacionadas
Las nuevas obligaciones que tendrán las juntas vecinales, con la entrada en vigor de la denominada Reforma Local, serán guiadas por las diputaciones, tal y como enfatizó ayer en Salamanca la presidenta de la institución provincial leonesa, Isabel Carrasco. Recordó que gracias precisamente a la presión de las diputaciones (a las que atribuyó de nuevo un papel vital en el presente y futuro, frente a los que abogan por su reforma o supresión), el Gobierno modificó el texto de la reforma, que ya no contempla ahora la supresión de las pedanías.
Carrasco reiteró que las entidades locales menores tendrán nuevos deberes, como la obligación de presentar sus cuentas anuales o la de contar con un inventario de la totalidad de sus bienes. «Todas están contentas con nuestro papel», recalcó.
«Deberán cumplir una serie de normas como hacen ya el resto de administraciones. Nosotros, desde las diputaciones, seguiremos estando cerca de las juntas vecinales para ayudarlas en todo lo que precisen», apuntó la presidenta.
También ensalzó el papel que juegan ordenación territorial y reforma local al ser «muy importantes» para poder garantizar el futuro de los pueblos pequeños de la Comunidad. «Aquí se encuentra el 80 por ciento de las juntas vecinales de toda España, y las de la provincia de León representan 80 por ciento de la Comunidad por delante de Burgos y Salamanca», señaló.
Indicó que en estos momentos desde la institución provincial se está analizando «en profundidad» el texto de la Reforma Local, ya en trámite parlamentario, para conocer todos los aspectos que afectan tanto a las diputaciones, como ayuntamientos y juntas vecinales. Recordó, en este sentido, que la Diputación cuenta con el asesoramiento del catedrático de Derecho Administrativo de la Universidad de León, Tomás Quintana, que en breve participará en una reunión, organizada por la institución, para explicar a alcaldes y pedáneos los principales puntos de la reforma y sus nuevas obligaciones. «Ahora nos toca un cambio, que yo creo que era necesario, y pienso que será beneficioso para todos los ciudadanos. Debemos amoldarnos a las nuevas circunstancias que nos ha tocado vivir», dijo Carrasco.
Durante los dos últimos años, la Diputación ha analizado a través de un grupo de trabajo con alcaldes y diputados el nuevo papel de las instituciones provinciales y la compatibilidad de la Reforma Local con la nueva ordenación del territorio, prevista por la Junta.
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