El Diario Montañés, 24/8/2012.- Representantes de Huesca, Palencia, Burgos y Cantabria sientan las bases de una federación que cree que las pedanías son «irrenunciables»
Algo más de un centenar de juntas vecinales acordaron anoche en Reinosa la creación de una comisión gestora que será el germen de la Federación Independiente de Entidades Locales Menores, el arma con el que pretenden plantar cara a lo que anoche calificaron como «el expolio más espantoso sufrido nunca en democracia».
La junta vecinales no parecen dispuestas a aceptar por las buenas la reforma de la Ley de Bases de Régimen Local que plantea la desaparición de 3.725 juntas y concejos en toda España. Anoche, en el salón de actos de la Casa de Cultura Sánchez Díaz, abarrotado por representantes de entidades locales menores de Huesca, Burgos, Palencia y Cantabria, dejaron claro que están dispuestos a morir matando. Primero, la junta gestora. El primer paso «de urgencia» para, en unas semanas, redactar estatutos y alumbrar la Federación.
Y es que las juntas y concejos no están dispuestos a dejar lo suyo en manos de otro y, además de defender que ellos son «el espíritu de nuestros pueblos», tienen su propia explicación a lo que está pasando. «Sólo hay un asunto evidente: todos los ayuntamientos están al borde de la bancarrota. ¿Cómo puede paliar en parte esa situación? Comiéndose en parte el patrimonio de las juntas vecinales. Eso, por un lado; por el otro, un Gobierno que quiere calmar a los ayuntamientos tras haber anunciado que el recorte también les afectaría a ellos y centrarán la poda en los únicos que no pueden generar déficit por la simple razón de que no nos está permitido hacerlo». Las palabras de Ricardo García, concejal de Nestares y uno de los promotores de la federación que anoche comenzó a gestarse en Reinosa, resumen el mensaje que una y otra vez se desplegó por el salón de actos. Ese, y que conseguir la supervivencia en las actuales circunstancias va a ser realmente complicado. Por eso, dijeron, lo imprescindible es crear un movimiento «suficientemente fuerte para plantar cara al Gobierno».
«La ley es una barbaridad»
Los pedáneos están convencidos de que el proyecto de ley que cocina el Ejecutivo es una barbaridad, que es «injusto y arbitrario». Tanto, que anoche llegaron a asegurar que su espíritu «mata a los pueblos y requisa sus bienes». Tras la mesa en la que se sentaron los promotores de la iniciativa, todos de la zona de Campoo, se colgó un cartel en el que se leía: «Los bienes comunales no son municipales. la comunidad no es Estados». Ambos mensajes serán también el lema de quienes puedan sumarse, el próximo 10 de septiembre, a la movilización que se prepara ante el Ministerio que dirige Cristóbal Montoro para exigir un indulto para las entidades locales menores. Hasta entonces, hoy mismo comienzan a redactar los estatutos de una federación independiente -que pretende convertirse en la voz de unas 600 junta vecinales y concejos-, y sumar su voz a otros para armar ese frente común «con el que luchar contra lo que se nos viene encima».
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