El Norte de Castilla, 29/9/2012.- El ministro de Hacienda y Administraciones Públicas, Cristóbal Montoro, recibirá en las próximas semanas una carta firmada por el presidente de la Diputación de Palencia, José María Hernández, en la que expresará de forma explícita el rechazo de los tres partidos representados en la corporación provincial –PP, PSOE e IU– a la supresión de las juntas vecinales, que contempla el Gobierno de España para ahorrar dinero. El envío de esta misiva se decidió ayer en el pleno ordinario de la Diputación durante el debate de una moción presentada por los socialistas, en la que se pedía que la institución se pronuncie en contra de esta medida del Gobierno de Mariano Rajoy.
La moción, que fue defendida por el alcalde de Saldaña, Miguel Nozal, pretendía forzar al grupo popular a mostrarse contrario a una medida incluida en la reforma de la administración local. A Nozal le respondió el presidente de la Diputación, José María Hernández, que recordó que en el anterior pleno, correspondiente al mes de agosto, se aprobó una propuesta del PP sobre la ordenación de competencias y la sostenibilidad de las entidades y administraciones públicas, que incluía a las juntas vecinales, en el sentido de que se las aplique la ley en el futuro, lo que, según Hernández, dejaba claro el apoyo del equipo de gobierno a las entidades locales menores.
No obstante, el titular de la Diputación fue más allá y anunció la presentación por el procedimiento de urgencia de una moción en la que se incluyeran dos puntos fundamentales: solicitar al Gobierno la reconsideración de la propuesta de suprimir las entidades locales menores, porque no generaría un ahorro económico significativo, y solicitar que la reforma de la administración local aclare las relaciones entre los ayuntamientos y las juntas vecinales –ya que se producen «muchas disfunciones»–, así como las competencias entre ellas, la financiación y los mecanismos de coordinación. «No nos quedamos solo en el rechazo a la supresión, sino que queremos ir más allá», señaló el titular de la Diputación.
P
osibilidad
Ante esta iniciativa, Miguel Nozal planteó la posibilidad de retirar la moción presentada por el PSOE si a cambio José María Hernández enviaba una carta al ministro Montoro en la que expresara el rechazo de los grupos políticos representados en la Diputación a la eliminación de las juntas vecinales.
Hernández asumió este compromiso «sin inconvenientes», y agradeció al PSOE la propuesta. «No tengo ningún problema en enviar esa carta, me cueste lo que me cueste. ¿Un tirón de orejas? Me da igual», aseguró Hernández, quien recordó que ya en otras ocasiones se ha manifiestado en contra de decisiones de gobiernos del PP, en la Junta o en el Estado. El presidente de la Diputación se comprometió a remitir la misiva a Montoro antes del próximo pleno ordinario y permitir que la oposición la lea antes de enviarla.
En el debate entre populares y socialistas, el portavoz de Izquierda Unida, Félix Iglesias, mostró su apoyo a la propuesta del PSOE, y calificó la del PP aprobada en el pleno de agosto como «una ceremonia de la confusión». «La propuesta del PSOE es más clara y directa. Nosotros también nos oponemos a la supresión de las entidades locales menores», señaló Iglesias.
El pleno aprobó solo con los votos del PP una modificación de las intensidades de la atención a los beneficiarios del servicio de ayuda a domicilio, que el portavoz del PP, Mario Granda, justificó para dar más opciones a los usuarios, ya que se pasa de 27 a 50 opciones. Sin embargo, la oposición considera que esta medida supone una reducción de las horas y un empeoramiento del servicio, por lo que votaron en contra. «Es una manera de atestiguar recortes en el servicio», aseguró Félix Iglesias, de IU». «Se pierde la esencia del carácter preventivo que tiene la ayuda a domicilio», agregó el socialista Jesús Guerrero.
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